La mandioca es un símbolo que conecta a diferentes grupos sociales de la Amazonía, desde los pueblos indígenas hasta las poblaciones tradicionales, y las poblaciones urbanas. La comida ancestral, inicialmente domesticada por los propios indígenas, ya se utiliza en diferentes cocinas de África, Asia, Oceanía y otras regiones del mundo, especialmente aquellas que se están en desarrollo. Esto se debe a que la plantación no requiere mucho cuidado y se puede hacer incluso en suelos poco fértiles y en áreas pequeñas.

Utilizada en la producción de alimentos, en la alimentación de ganado vacuno y equino, e incluso en la fabricación de productos farmacéuticos, la raíz desempeña un papel clave en la seguridad alimentaria de la población mundial. En vista de esto, la Organización de las Naciones Unidas (ONU) declaró a la mandioca como el alimento del siglo 21.